Eventos extraños y maravillosos toman lugar con cada vuelta de página en la serie de dibujos diarios continuos de Pep Carrió. En 2007, el artista se retó a sí mismo a dibujar todos los días, y una manera fácil de mantenerse motivado y responsable fue llenar un cuaderno de Moleskine completo. Con los materiales que tenía a mano, comenzó un proyecto que mantuvo girando sus ruedas creativas mientras desafiaba las posibilidades de una simple doble página.
Las ilustraciones de Carrió van desde escenas fantásticas de aventura, como una ballena sumergiéndose debajo de un diminuto bote lleno de turistas, hasta escenas metafísicas de figuras anónimas que deambulan por paisajes enigmáticos, flotando tranquilamente o enraizadas en su lugar como árboles. Al hojear los cuadernos de bocetos, la cronología se despliega de manera secuencial, pero la narrativa sigue siendo un misterio fascinante.